Nuestros hijos son genios en busca de datos
Por eso los niños experimentan, juegan, suben, bajan… ¡no paran!, buscando nuevas cosas que aprender, nuevas formas de hacer crecer su cerebro. Y esto nos convierte a nosotros, los padres, en profesores de la más alta responsabilidad. Somos responsables de lo que aprenden y, por tanto, de cómo y cuánto desarrollan su cerebro.
El hecho de que nosotros no seamos conscientes de que les estamos enseñando no quiere decir que el niño no aprenda todo cuanto nos ve hacer y nos oye decir.
Pero esto, además de una gran responsabilidad es una ventaja. Quiere decir que tenemos en nuestra manos la posibilidad de hacer que nuestros niños tengan el mejor desarrollo cerebral posible. ¿Cómo? Tratándoles como verdaderamente son: no son «locos bajitos» corriendo por toda la casa para fastidiar a mamá, son genios en busca de datos. Nosotros debemos ser sus ayudantes de laboratorio.
¿Cómo desarrollar su cerebro?
- Enséñale todo cuanto esté a su alrededor. No pongas límites a su campo de experimentación. Tira «los muros» de su parquecito, tírate con él al suelo, y habla sin parar. Tu hijo quiere aprenderlo todo y lo quiere saber ahora mismo.
- Si tu hijo tiene ya dos o tres años, enséñale a leer. ¡Cuantos de nuestros padres llegaron a su escuela sabiendo leer! Es muy sencillo. Haz fotocopias en grande de todos sus libros. Intenta que la letra sea lo más grande posible (3 cm. de alto no es demasiado), siéntate a su lado, y lee… verás cómo se fija y presta atención. No dejes pasar un solo día sin haber leído al menos durante 10 minutos, aunque sea a ratitos.
- Alguien dijo que los juguetes son inventos de los adultos para liberarse de los niños. Creo que no le faltaba razón. Hoy también la televisión es la más abusada de las baby-sitters. Si les dedicamos tiempo de pequeños, cuando sus cerebros están en pleno desarrollo, en la cresta de la ola, nos evitaremos muchos quebraderos de cabeza cuando lleguen las notas, evaluaciones, etc., y ya no quieran que estemos encima de ellos para ayudarles.
Sus 6 primeros años son lo más preciado del mundo para desarrollar su inteligencia; es importante no dejarlos pasar: el desarrollo de su cerebro está en tus manos.