Nuestros hijos están en formación. Por eso se equivocan. No tienen ni nuestra experiencia ni sus capacidades totalmente desarrolladas. Se deben equivocar.
Y sin darnos cuenta, cada día les recordamos y recriminamos TODAS las veces que se equivocan; a veces incluso les castigamos en lugar de ayudarles a que descubran por qué lo han hecho, estrategias para evitar repetirlo en un futuro…. Y lo más importante, no les decimos las veces que lo han hecho bien.
Te proponemos un experimento de una semana de duración. Haz lo contrario a lo que sueles hacer habitualmente:
- Fíjate SOLO en las cosas buenas que hace tu hijo.
- Escríbelas en una libreta.
- Cada noche, léeselas.
Solo durante una semana. Increíble la sensación de satisfacción de tu hijo, ¿verdad?
Hazlo cada día, durante una semana y observa su cambio de actitud. Con seguridad que notarás cambios positivos.
Y si durante una semana ha ido bien, ¿por qué no hacerlo durante un mes?
Al cabo de poco tiempo, lo harás de manera inconsciente y sin darte cuenta, no solo tu hijo cambiará su comportamiento, sino que tú aprenderás a fijarte más en los aspectos positivos de tu hijo, fomentando que estos se repitan con más regularidad y desmotivando los negativos.
Para motivar, no hay más secreto que este: fijarse en lo maravilloso que tiene nuestros hijos. ¡Así de sencillo!
Ejemplo
Martes 15. Cosas buenas sobre Carlos:
- Se ha levantado con una sonrisa.
- Se ha vestido solo.
- No se ha peleado con su hermano cuando éste le ha quitado su tostada.
- Ha puesto la mesa sin que se lo dijera yo.
- Se ha despedido con un abrazo especial.
- He disfrutado mucho hablando con él sobre su día en el colegio.
- Me ha gritado pero luego me ha pedido perdón.
- Ha sido puntual cuando le he llamado a cenar.
- Ha compartido el mando de la televisión sin enfadarse.
- No tenía ganas de irse a la cama pero, después de dos avisos, ha obedecido.
- Se ha enfadado con Marta pero ha sabido buscar una solución.
- Me ha gustado cuando se ha sentado a mi lado a leer.
- Se ha acostado con una sonrisa…
Elena Roger Gamir
Pedagoga – Solohijos.com